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Resumen
Las guardias campesinas en Colombia son una figura civil creada por el movimiento campesino para mediar y resolver conflictos en el territorio. Este texto aborda la experiencia de la Guardia Campesina del Catatumbo, una de las pioneras en esta iniciativa, creada para promover el diálogo, salvaguardar la vida y defender los derechos fundamentales en la región del Catatumbo. En el documento se abordan algunas de las barreras que enfrentan, como la estigmatización, la criminalización y la falta de reconocimiento legal. A su vez, el texto incluye algunos beneficios de las Guardias Campesinas para la pacificación de los territorios, incluyendo su capacidad para mediar y resolver conflictos, el trabajo en red que adelantan con otras expresiones de guardias comunitarias y su experiencia en proporcionar seguridad y mantener la convivencia.. Dada la experiencia de las guardias campesinas, se plantea la necesidad de repensar el papel de la policía en Colombia y América Latina, reconociendo las formas de resolución de conflictos desarrolladas por las comunidades campesinas y étnicas.
El líder campesino Guillermo Quintero, de la Asociación Campesina del Catatumbo (ASCAMCAT), que nos brindó su tiempo, solicitó que hiciéramos memoria de Emérito Buendía, miembro de la Guardia Campesina, asesinado en 2019 por la fuerza pública, en medio de las confrontaciones entre el ejército y las comunidades campesinas durante un proceso militar de erradicación forzada. “Fue asesinado precisamente cumpliendo con su función en el marco de un escenario de resistencia, murió con su bolillo patriótico al hombro, con su camiseta puesta”, Guillermo.
¿Qué son las Guardias Campesinas?
El 2 de agosto de 2022 fue radicado ante el Congreso colombiano un proyecto de ley que buscaba reconocer a las Guardias Campesinas como mecanismo comunitario de protección colectiva y territorial y de defensa de derechos humanos. Esta iniciativa del partido Comunes1En el año 2016 se logró el Acuerdo Final de Paz con la antigua guerrilla de las FARC-EP, que llevaba cerca de 60 años en confrontaciones armadas con el Estado colombiano. Como resultado de este acuerdo, se les garantizó participación política a miembros de este grupo armado, que pasó a hacer parte del Congreso de la República, primero con el partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común y, en la actualidad, el partido Comunes. En este partido, las víctimas del conflicto armado y personas de la sociedad civil también han tenido participación con curules. desató polémica y volteó las miradas de opositores y reaccionarios a la defensa de derechos del campesinado. Expresiones cargadas de estigma en contra de las formas de organización campesina no se hicieron esperar y no fueron pocos los señalamientos que recibió esta figura.
Contrario a la desinformación y estigmatización que han adelantado sectores de la opinión pública, este artículo se pregunta qué son las Guardias Campesinas, su relación con las dimensiones de la vida campesina, los retos y oportunidades que tienen en el panorama actual. Para ello, explora la literatura – aún incipiente- sobre esta expresión comunitaria, especialmente el trabajo desarrollado por la Asociación Nacional de Zonas de Reserva Campesina (ANZORC) en el marco del proyecto “Las vidas campesinas importan” y la experiencia de la Guardia Campesina de la Asociación Campesina del Catatumbo (ASCAMCAT)2A nivel regional y nacional, Guillermo ha asumido un especial liderazgo en la defensa de la figura de las guardias campesinas. Ha participado desde su fundación en la Guardia Campesina del Catatumbo y vivido de cerca el proceso de apropiación y materialización de esta figura en el territorio. La Guardia Campesina del Catatumbo ha sido un antecedente importante para las Guardias Campesinas en otros territorios., a través de la voz de Guillermo Quintero, Coordinador Regional de la Guardia Campesina y líder de esta figura.
Desde Dejusticia y la ANZORC hemos avanzado en los últimos años en la visibilización de los derechos del campesinado entendido como “Sujeto3“Sujeto campesino es una categoría social que incluye a todas las personas, sin distingo de edad, sexo y género” citado en La constitución del campesinado: luchas por reconocimiento y redistribución en el campo jurídico / Güiza Gómez, Diana Isabel, Ana Jimena Bautista Revelo, Ana María Malagón Pérez, Rodrigo Uprimny Yepes. — Bogotá: Editorial Dejusticia, 2020. intercultural, que se identifica como tal, involucrado vitalmente con el trabajo directo con la tierra y la naturaleza, inmerso en formas de organización social basadas en el trabajo familiar y comunitario no remunerado o en la venta de su fuerza de trabajo”4Acosta Navarro, O. L., Duarte Torres, C. A., Fajardo Montaña, D., Ferro Medina, J. G., Gutiérrez Sanín, F., Machado Cartagena, A., Penagos Concha, Á. M. y Saade Granados, M. M. (2018). Conceptualización del campesinado en Colombia. Documento para su definición, caracterización y medición. Instituto Colombiano de Antropología e Historia (icanh). Recuperado de https://www.icanh.gov.co/ recursos_user/ICANH%20PORTAL/SUBDIRECCIÓN%20 CIENTÍFICA/ANTROPOLOGIA/Conceptos/2020/ Conceptualizacion_del_campesinado_en_Colombia.pdf Citado en La constitución del campesinado: luchas por reconocimiento y redistribución en el campo jurídico / Güiza Gómez, Diana Isabel, Ana Jimena Bautista Revelo, Ana María Malagón Pérez, Rodrigo Uprimny Yepes. — Bogotá: Editorial Dejusticia, 2020 y en evidenciar los efectos de la estigmatización que ha generado la persecución de la fuerza pública a liderazgos y organizaciones campesinas5ANUC, FENSUAGRO, CNA, ANZORC, CIMA, PUPSOC, MUA, Dejusticia, & IEI Universidad Javeriana de Cali. (2022). GUERRA CONTRA EL CAMPESINADO (1958-2019) Dinámicas de las violencias y trayectorias de lucha. https://www.dejusticia.org/wp-content/uploads/2022/03/Informe-ejecutivo-Guerra-contra-el-campesinado.pdf y Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad. (2022). El campesinado y la guerra. (Colombia Adentro. Relatos territoriales sobre el conflicto armado.) [Informe de esclarecimiento]. CEV.. En este sentido, en este documento se expone el estigma, como el proceso en el que se “reduce, se marca o se devalúa” a un individuo o una colectividad, lo cual impacta en las formas de relacionamiento propio y externo6Yang, L. H., Kleinman, A., Link, B. G., Phelan, J. C., Lee, S., & Good, B. (2007). Cultura y estigma: La experiencia moral. ESTE PAÍS, 12.. La larga trayectoria del conflicto armado colombiano ha demostrado los efectos de la estigmatización en contra de esta población, la cual ha resultado en un quiebre en el relacionamiento con la institucionalidad y violaciones a los derechos humanos.
La estigmatización en contra del campesinado en Colombia ha sido promovida a través de tres discursos estatales: la lucha contra insurgente y contra el terrorismo, que generó etiquetas en esta población como “enemigo interno”, desde la década del sesenta o sujeto insurgente desde el setenta hasta la actualidad7ANUC, FENSUAGRO, CNA, ANZORC, CIMA, PUPSOC, MUA, Dejusticia, & IEI Universidad Javeriana de Cali. (2022). GUERRA CONTRA EL CAMPESINADO (1958-2019) Dinámicas de las violencias y trayectorias de lucha. https://www.dejusticia.org/wp-content/uploads/2022/03/Informe-ejecutivo-Guerra-contra-el-campesinado.pdf y Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad. (2022). El campesinado y la guerra. (Colombia Adentro. Relatos territoriales sobre el conflicto armado.) [Informe de esclarecimiento]. CEV.); la guerra contra las drogas, especialmente en la década del noventa desde donde se ha definido al campesinado como “delincuente” o “narcotraficante”8ANUC, FENSUAGRO, CNA, ANZORC, CIMA, PUPSOC, MUA, Dejusticia, & IEI Universidad Javeriana de Cali. (2022). GUERRA CONTRA EL CAMPESINADO (1958-2019) Dinámicas de las violencias y trayectorias de lucha. https://www.dejusticia.org/wp-content/uploads/2022/03/Informe-ejecutivo-Guerra-contra-el-campesinado.pdf, Ciro Rodríguez, E. (2016). Cultivando coca en el Caquetá: Vidas y legitimidades en la actividad cocalera. [Doctorado]. Universidad Nacional Autónoma de México, Centro Nacional de Memoria Histórica. (2019). El Tigre no es como lo pintan. Estigmatización y conflicto armado en el bajo Putumayo. CNMH. https://centrodememoriahistorica.gov.co/wp-content/uploads/2020/02/EL-TIGRE_EN-BAJA.pdf , Ramírez Lamus, M. C. (2001). Entre el estado y la guerrilla: Identidad y ciudadanía en el movimiento de los campesinos cocaleros del Putumayo (ICANH). https://babel.banrepcultural.org/digital/collection/p17054coll10/id/2898/ y Ramírez, M. C. (2001). Protestas Agrarias. Los movimientos sociales en el Putumayo: El poder visible de la sociedad civil y la construcción de una Nueva Ciudadanía. ; y, en los últimos años, con la incorporación de mecanismos para controlar la deforestación se han empleado etiquetas como “criminales” o “depredadoras ambientales”.
Debido a la estigmatización por estas etiquetas, en los últimos años el Estado colombiano privilegió y empleó masivamente acciones militares encabezadas por la fuerza pública como estrategias para combatir la lucha armada, la guerra contra las drogas y la deforestación. Estos señalamientos también impactaron en los repertorios de la violencia por parte de grupos al margen de la ley. Como resultado, el campesinado quedó en medio del fuego cruzado de la guerra, agravando las condiciones de vida de esta población. La estigmatización del campesinado ha tenido resultados evidentes. Algunas de las violencias que han resultado del señalamiento a esta población son las persecuciones, señalamientos, asesinatos selectivos y ejecuciones extrajudiciales9ANUC, FENSUAGRO, CNA, ANZORC, CIMA, PUPSOC, MUA, Dejusticia, & IEI Universidad Javeriana de Cali. (2022). GUERRA CONTRA EL CAMPESINADO (1958-2019) Dinámicas de las violencias y trayectorias de lucha. https://www.dejusticia.org/wp-content/uploads/2022/03/Informe-ejecutivo-Guerra-contra-el-campesinado.pdf, Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad. (2022). El campesinado y la guerra. (Colombia Adentro. Relatos territoriales sobre el conflicto armado.) [Informe de esclarecimiento]. CEV, y Jurisdicción Especial para la Paz. (2021). Macro caso 03: Asesinatos y desapariciones forzadas presentados como bajas en combate por agentes del Estado. https://www.jep.gov.co/especiales1/macrocasos/03.html .. Esto ha concluido en una concentración de la violencia en contra del campesinado innegable. Según estimaciones propias, el 63.6% de víctimas del país del desplazamiento forzado, y el 58.5% de otros tipos de violencias son campesinas10ANUC, FENSUAGRO, CNA, ANZORC, CIMA, PUPSOC, MUA, Dejusticia, & IEI Universidad Javeriana de Cali. (2022). GUERRA CONTRA EL CAMPESINADO (1958-2019) Dinámicas de las violencias y trayectorias de lucha. https://www.dejusticia.org/wp-content/uploads/2022/03/Informe-ejecutivo-Guerra-contra-el-campesinado.pdf. Esta tendencia se corrobora en la estimación realizada por la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad (CEV)11La CEV fue una instancia resultante del Acuerdo Final de Paz con la antigua guerrilla de las FARC-EP, con la cual se buscó contribuir a la memoria para la no repetición de la violencia en el país; las diferencias en las estimaciones responden al manejo de las bases de datos, pues el trabajo propio se desarrolló desde una lectura de la Base de Violencia Sociopolítica y, para desplazamiento forzado, la base del Registro Único de Víctimas. Por su parte, la CEV trabajó a partir del Registro Único de Víctimas. , la cual estableció que el 45.5% del total de víctimas del país son campesinas12Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad. (2022). El campesinado y la guerra. (Colombia Adentro. Relatos territoriales sobre el conflicto armado.) [Informe de esclarecimiento]. CEV..
Con el ánimo de preservar la vida, garantizar la permanencia en el territorio y restablecer el diálogo con el Estado, el campesinado y organizaciones de diferentes regiones del país han gestado un sin número de mecanismos de resistencia, protección13En la cartilla “Protocolo de autoprotección en DDHH con enfoque de género de la Asociación Nacional de Zonas de Reserva Campesina – ANZORC-” publicada por la ANZORC en el año 2021, como resultado de los procesos de sistematización del proyecto “Las Vidas Campesinas Importan” se entiende como protección: “el proceso de implementación de acciones de cuidados preventivos ante posibles riesgos, buscando impedir la materialización de amenazas y el fortalecimiento de capacidades (individuales y colectivas) para resguardar la vida, libertad e integridad, estas acciones pueden ser barreras físicas y aspectos no materiales como marcos normativos y mecanismos legales vigentes existentes para garantizar el respeto de los derechos”, en este caso la protección se ve como implementación de los mecanismos legales externos que protegen y garantizan los DDHH; por otro lado la autoprotección se entiende como “las medidas, herramientas y capacidades propias de las personas y las comunidades que son implementadas diariamente para disminuir los riesgos que se enfrentan de manera permanente en los territorios y/o en el ejercicio de las actividades organizativas” en este sentido los mecanismos de autoprotección son contextuales y comunitarios en su creación, implementación y sostenimiento. y autoprotección de derechos humanos14Desde el 2020 la ANZORC viene implementando el proyecto “Las Vidas Campesinas Importan”, en el marco de su línea estratégica de derechos campesinos y derechos humanos. Este proyecto ha permitido la sistematización y visibilización de las estrategias comunitarias de protección y autoprotección que existen dentro de las Zonas de Reserva Campesina, especialmente en el Catatumbo, Meta y Guaviare.. Este es el caso de los espacios y campamentos humanitarios, las casas refugio de derechos humanos, comisiones de verificación, cordones humanitarios y espacios de diálogo interinstitucional, que son herramientas tanto individuales como colectivas de protección comunitaria campesina. También lo son las Guardias Campesinas, un mecanismo no violento que ha surgido para la defensa del territorio. La idea de territorialidad, en este análisis es definida “como un espacio socialmente construidos por sus habitantes, quienes desarrollan allí la mayor parte de su vida económica política y social”15La constitución del campesinado: luchas por reconocimiento y redistribución en el campo jurídico / Güiza Gómez, Diana Isabel, Ana Jimena Bautista Revelo, Ana María Malagón Pérez, Rodrigo Uprimny Yepes. — Bogotá: Editorial Dejusticia, 2020, página 50., la garantía de seguridad colectiva, la defensa del medio ambiente y la protección comunitaria.
Una apuesta de justicia comunitaria campesina
Las Guardias Campesinas son un mecanismo de autoprotección que aportan al reconocimiento del campesinado como un sujeto político de derechos. Nacen en el seno de las comunidades y organizaciones campesinas para promover el diálogo, salvaguardar la vida, posibilitar la permanencia en el territorio y promover la defensa de los derechos fundamentales, especialmente en zonas donde la alta intensidad del conflicto armado y la presencia constante o transitoria de grupos al margen de la ley ha generado desconfianza entre el campesinado y el Estado. Algunos antecedentes de esta figura son las Guardias Indígenas, que tienen reconocimiento constitucional en el marco de su jurisdicción especial16De acuerdo con la Constitución Política de Colombia, las autoridades de los pueblos indígenas pueden juzgar y aplicar las leyes dentro de su ámbito territorial, conforme a sus propias normas y procedimientos, siempre que no sean contrarios a la Constitución y las leyes de la República. y las Guardias Cimarronas, la primera con pleno reconocimiento constitucional.
Por su naturaleza, las Guardias Campesinas son propuesta fundamentada en la autoridad campesina y la justicia comunitaria. La autoridad campesina hace referencia a las formas propias de organización campesina que permiten acciones de gobierno y gobernanza sobre el territorio. En primer lugar, la autoridad campesina es la facultad que tiene la comunidad campesina para crear y hacer cumplir sus acuerdos y normas de convivencia que permiten mantener la identidad y garantizar la dignidad17ANZORC. (2021). ABC de la Guardia Campesina.. Esta autoridad es aplicada a través de los mandatos que les da la comunidad a las organizaciones campesinas en sus diferentes niveles y de acuerdo a su competencia. En segundo lugar, la justicia comunitaria18Constitucionalmente, la justicia comunitaria ha sido reconocida como una estrategia creada desde la población civil, especialmente en zonas donde el acceso a la justicia es insuficiente para la resolución pacífica de conflictos, que permite resolver disputas y conflictos de una manera no violenta (Sentencia C-631-12, 2012). es el conjunto de normas y procedimientos mediante los cuales un grupo o comunidad (campesinas, étnicas o populares) tramita sus conflictos o regula su vida de acuerdo a su identidad, sin recurrir al sistema de justicia estatal. La justicia comunitaria pretende reconciliar más que castigar, buscar lo más justo en cada caso y conservar la armonía interna de la comunidad, siendo un aporte valioso para el tratamiento de conflictos y la transformación social19ANZORC. (2021). ABC de la Guardia Campesina,Salazar Gallego, J. (2021). El papel de la justicia comunitaria en el escenario de construcción de paz en Colombia. Revista Derecho del Estado, 50, 323-351. https://doi.org/10.18601/01229893.n50.11 y Uprimny Yepes, R. (1994). Justicia y resolución de conflictos: La alternativa comunitaria. 1..
Entonces, la guardia es una estrategia civil que emplea, principalmente, el diálogo como mecanismo de resolución de conflictos. Este mecanismo se erige sobre tres de las cuatro dimensiones de la vida campesina: territorio, cultura y organizatividad20Según el trabajo liderado por una Comisión de Expertos/as en asuntos rurales, en Colombia la vida campesina se caracteriza por cuatro dimensiones: cultural, productiva, organizativa y territorial. Acosta Navarro et al. (2018). Conceptualización del campesinado en Colombia. Documento técnico para su definición, caracterización y medición. Comisión de Expertos sobre asuntos campesinos; ICANH.. La guardia, territorialmente, se encuentra en la zona de la organización campesina; culturalmente, manifiesta en sus uniformes elementos distintivos y simbólicos de la identidad campesina (como las botas y otros íconos); y organizativamente está íntimamente relacionada con espacios de asociatividad y organización campesina local21Comunicación personal con Guillermo Quintero, 22 de julio de 2022..
En el nivel organizativo y territorial, la Guardia Campesina debe ser mandatada por las comunidades que habitan los territorios sobre los cuales ésta va a desarrollarse. Es por esto que las Guardias Campesinas son reguladas por las Juntas de Acción Comunal (JAC)22Las JAC son formas democráticas de organización social y comunitaria, reconocidas legalmente por el Estado colombiano, en donde pueden participar mayores de 14 años y cuyo objetivo es atender las necesidades comunitarias y solucionar los problemas territoriales. Esta forma de organización ciudadana se da tanto en zonas rurales, como en urbanas, siendo el centro en las primeras, los barrios, y en las segundas las veredas. Las veredas son delimitaciones territoriales que se realizan al interior de los municipios con el objetivo de caracterizar administrativamente su extensión y población. de cada vereda en la que operan; y por las organizaciones campesinas regionales organizadas en torno al reconocimiento de sus derechos23ANZORC. (2021). ABC de la Guardia Campesina,Salazar Gallego, J. (2021). El papel de la justicia comunitaria en el escenario de construcción de paz en Colombia. Revista Derecho del Estado, 50, 323-351. https://doi.org/10.18601/01229893.n50.11. La estructura de las Guardias Campesinas es definida por estas dos instancias, teniendo en cuenta que de esto dependerá el funcionamiento efectivo del mecanismo, especialmente en los momentos de emergencia que ameriten acompañamiento rápido e inmediato.
Retos de las Guardias Campesinas
A pesar de que las Guardias Campesinas se han venido consolidando en los últimos años y cuentan con legitimidad y reconocimiento por parte de las comunidades24Albarracín, J., Campo, D., Castaño, C., Useche, V., Vargas, L., & Valencia, I. H. (2022). Las guardias comunitarias como protectoras de vida y constructoras de paz (Paz y Seguridad). ICESI, y ANZORC. (2021). ABC de la Guardia Campesina,Salazar Gallego, J. (2021). El papel de la justicia comunitaria en el escenario de construcción de paz en Colombia. Revista Derecho del Estado, 50, 323-351. https://doi.org/10.18601/01229893.n50.11, todavía enfrentan retos en el ejercicio de sus labores para la defensa del territorio. A partir de la narración de Guillermo fue posible identificar, al menos, cinco barreras. Dos internas, que consisten en la articulación al interior del movimiento campesino y con otras expresiones de Guardias comunitarias; y tres externas, que son la estigmatización, la criminalización y el desconocimiento jurídico del mecanismo. En este artículo nos concentramos en estas últimas tres que, aunque son barreras distintas, están estrechamente relacionadas.Esto, debido a las limitaciones en la extensión del artículo y a la información que teníamos disponible a partir de la conversación con Guillermo Quintero.
Las Guardias Campesinas viven la estigmatización y criminalización previa a la que ya se sometía a los procesos organizativos y sus territorialidades. La permanencia de imaginarios estigmatizantes sobre esta población, al asociarlos con grupo armados ilegales, se ha hecho evidente en el relacionamiento con el sector público y la fuerza pública, imposibilitando diálogos entre pares y aumentando la desconfianza y la zozobra. Así también lo reconocen los liderazgos campesinos. De acuerdo con Guillermo, “al comienzo la estigmatización era muy grande, extremadamente grande. Por redes nos atacaban, por medios, de frente, de guerrilleros, terroristas, en fin, de milicianos, en fin”. El uso de calificativos con cargas negativas en muchos territorios ha generado el recrudecimiento de la violencia. De manera particular, la estigmatización ha recaído en contra de quienes se han organizado social y políticamente en torno a la defensa de la identidad campesina25ANUC, FENSUAGRO, CNA, ANZORC, CIMA, PUPSOC, MUA, Dejusticia, & IEI Universidad Javeriana de Cali. (2022). GUERRA CONTRA EL CAMPESINADO (1958-2019) Dinámicas de las violencias y trayectorias de lucha. https://www.dejusticia.org/wp-content/uploads/2022/03/Informe-ejecutivo-Guerra-contra-el-campesinado.pdf, Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad. (2022). El campesinado y la guerra. (Colombia Adentro. Relatos territoriales sobre el conflicto armado.) [Informe de esclarecimiento]. CEV. ). La estigmatización ha dado paso, en muchas ocasiones, a la criminalización de los liderazgos campesinos a través de la imputación de delitos como terrorismo, secuestro, entre otros. Es decir, al uso de la persecución penal para intimidar, inhibir o deslegitimar su trabajo comunitario.
La ausencia de reconocimiento jurídico de esta figura, a saber, que no esté protegida por la constitución y las leyes como una forma de organización y protección comunitaria legítima y respaldada por el ordenamiento jurídico colombiano, ha generado que se criminalice a miembros de la Guardia Campesina por acciones no violentas llevadas a cabo en el marco de sus funciones26Carrillo, A. (2021, octubre 28). Campesinos liberan a los 180 soldados en el municipio de Tibú, Norte de Santander. W Radio. https://www.wradio.com.co/noticias/regionales/campesinos-liberan-a-los-180-soldados-en-el-municipio-de-tibu-norte-de-santander/20211028/nota/4174633.aspx . Por ejemplo, se están enfrentando a procesos penales por el delito de secuestro a soldados debido a la custodia de la guardia campesina en los asentamientos campesinos27Los asentamientos campesinos son una estrategia de defensa del territorio, empleada en casos de erradicaciones violentas a cultivos de uso ilícito. La comunidad, en estos casos, se asienta pacíficamente de manera indefinida en el lugar donde está la fuerza pública., desde los cuales se hace llamados a la acción no violenta previa a la interlocución: “si nos vemos amenazados por algún actor pues lo que hacemos es rodearlo y con los bolillos hacer un círculo, tenerlos en el medio sin ningún tipo de agresión, verbal, física, ningún tipo de contacto físico. Y a partir de allí pues se hace la interlocución”. Muchos de estos procesos se usan para amenazar la continuidad del trabajo de la Guardia.
Oportunidades de las Guardias Campesinas
El fortalecimiento en los años recientes de las Guardias Campesinas en los territorios ha permitido el reconocimiento de sus funciones conciliadoras y la construcción de espacios de diálogo con los diferentes actores – incluyendo la fuerza pública-, manteniendo la autonomía campesina. A pesar de la estigmatización promovida desde los anteriores gobiernos, en la actualidad este mecanismo constituye un elemento positivo para la mediación y resolución de conflictos en el territorio, siendo un actor fundamental en el mantenimiento de la convivencia. El empleo de estas herramientas ha evitado confrontaciones violentas y posicionado el diálogo como solución a los conflictos.
Es necesario reconocer que las barreras externas -identificadas en el apartado anterior- son, a su vez, oportunidades para el fortalecimiento de las Guardias Campesinas. La articulación entre Guardias es un punto relevante, dado que, aunque las Guardias tienen un propósito común, las estructuras organizativas, funciones y estrategias para lograr dicho fin no son las mismas, sino que varían entre una guardia campesina y otra. Es necesario encontrar mecanismos para que las Guardias Campesinas estén coordinadas y articuladas en temas más concretos, relacionados con la estructura misma de la figura y las estrategias o proyectos a largo plazo.
Asimismo, la coordinación con otras expresiones de Guardias comunitarias permite afianzar el diálogo intercultural en el territorio. El campesinado generalmente convive con pueblos indígenas y afrocolombianos, quienes tienen autonomía sobre sus territorios, maneras propias de defender el territorio y dinámicas culturales propias. En ese contexto, las Guardias Campesinas son un espacio que puede promover el diálogo con pueblos étnicos y población racializada, encontrando puntos de coincidencia y mejorando el tejido comunitario a través de la identificación de experiencias comunes y alternativas a los conflictos emergentes. Sobre esto, ya ha habido algunas experiencias previas de espacios de encuentro con las Guardias indígenas y cimarronas, como el Encuentro nacional de Guardias indígena, cimarrona, campesina y redes de autocuidado en noviembre de 2019.
Reflexiones finales
Con base en lo mencionado, es preciso destacar la amplia experiencia de las Guardias Campesinas en relación con proveer protección y seguridad en los territorios. El papel que han desempeñado históricamente en la resolución de conflictos ha sido esencial para el mantenimiento de la convivencia al interior de las comunidades, lo cual representa una posibilidad de conversación con la policía, que también debe asumir estas funciones según el mandato constitucional. En ese sentido, resulta fundamental promover diálogos con la institucionalidad para empezar por superar la estigmatización y la criminalización a la Guardia Campesina y, en seguida, generar espacios de interlocución constructivos.
Para repensar el papel de la policía en Colombia y en América Latina es importante reconocer que las comunidades campesinas y étnicas ya han desarrollado sus propias formas de resolver conflictos, mantener la convivencia y la seguridad, con base en sus propias trayectorias históricas, saberes, prácticas y formas tradicionales de relacionarse entre ellas y con el territorio.De modo que, a partir de estas experiencias, se puede transitar a un modelo de seguridad comunitaria que respete la diversidad de formas organizativas y no pretenda que la policía irrumpa e intente resolver conflictos en lugares donde ya está establecida una organización sólida y legítima que cumple este papel de mejor manera, con herramientas y estrategias que no son acordes a los usos y costumbres de las comunidades y que, muchas veces, pueden desencadenar otro tipo de conflictos o, incluso, violencias al interior de la misma comunidad o en la interacción con otras.
Endnotes
Autoras
Natalia Vargas Zamora. Socióloga de la Universidad Externado de Colombia, estudiante de la especialización en políticas públicas y justicia de género de la FLACSO Brasil. Coordinadora del proyecto de DDHH “Las Vidas Campesinas Importan” e integrante del equipo de apoyo en DDHH de la ANZORC.
Ana María Malagón Pérez. Socióloga, especializada en economía social de la Universidad Externado de Colombia. Antigua investigadora de la línea de campesinado y tierras de Dejusticia, donde desarrolló investigaciones sobre derechos del campesinado, conflicto armado y desarrollo rural.
Sofía Forero Alba. Politóloga y abogada de la Universidad de los Andes, además de candidata a grado de la maestría en Derecho, gobierno y gestión de la justicia de la misma universidad. También tiene un diplomado superior en Seguridad, violencia y democracia del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (-CLACSO). En Dejusticia se ha desempeñado como investigadora en la línea de Sistema judicial y actualmente trabaja en el Área internacional. Sus temas de investigación e incidencia, tanto nacional como internacional, son consisten en judicial politics, acceso a la justicia, cierre de espacios de participación de la sociedad civil, y protesta social y policía.
Ilustrado por Estefanía Henao via femiñetas
Estefanía Henao. Investigadora y dibujante de cómics. Autor de los cómics Tres Picas (2020) y El canto de la golondrina (2023). Es co-investigadora de Incógnitas: mujeres en el cómic colombiano ayer y hoy, proyecto que busca visibilizar a las mujeres que hacen parte del cómic en Colombia.
femiñetas: feminismo en viñetas, es un colectivo, plataforma ilustrada y transoceánica. Está formado por unxs 300 ilustradorxs y escritorxs de diferentes partes del mundo que forman una comunidad activista narrada en el lenguaje de cómic.
Flor Coll es la coordinadora y fundadora de femiñetas. Es periodista y Licenciada en Comunicación Social de la Universidad Nacional de Rosario (Argentina) y Magíster en Género y Comunicación de la Universidad Autónoma de Barcelona (España). Luego de trabajar más de 15 años como periodista en radio, TV y medios impresos argentinos, actualmente realiza campañas de género y comunicación para oenegés y es docente en la Maestría en Comunicación y Género de la Universidad Abierta de Barcelona en España (UAB).
En 2020 Co-creó Chamana Comunicación, una consultora con sede en Barcelona donde es directora de prensa y formación.